Tener una dieta balanceada es importante, ya que permite tener un adecuado control de peso de acuerdo a los requerimientos propios de cada persona. A continuación se dan a conocer las propiedades de algunos alimentos.

● Probióticos: los alimentos fermentados ayudan a mejorar la flora intestinal (bacterias ‘buenas’ que se encuentran en el hígado y  que ayudan en la digestión y salud intestinal) el principal ejemplo es el yogur natural.

● Prebióticos: Son los alimentos que nutren a las bacterias buenas del intestino, algunos alimentos ricos en prebióticos son: ajo, cebolla, espárragos, granos integrales.

● Fibra: Ayuda a que sea más fácil evacuar las heces, aumentando su tamaño y haciéndolas más blandas. Se recomienda alimentarse con productos vegetales altos en fibra como frutas, verduras, nueces, lentejas, frijol, arroz integral y otros granos integrales.

Alimentos altos en proteína, evitando  el consumo de carnes rojas.

Alimentos altos en vitamina D como pescado, productos lácteos, cereales fortificados, jugo de naranja.

● Biotina o vitamina B: Huevo, hígado de res, semillas de girasol, espinaca, brócoli.

● Antioxidantes: Son sustancias que pueden brindar un efecto antioxidante y antiinflamatorio, estas son las frutas, vegetales, cereales, legumbres y té.

La ingesta de vegetales y comer suficiente fibra pueden ser una estrategia para prevenir el estreñimiento, que se ha asociado con los espasmos musculares. A su vez, mantener niveles adecuados de potasio se ha asociado con menor incidencia de espasmos musculares; alimentos como el melón, el plátano y el brócoli son alimentos ricos en potasio.

Es importante reducir el consumo de alimentos como:

● Productos procesados, ya que tienen alto contenido de sal y grasas saturadas como lo son los embutidos, salsas, botellería industrial, etc. 

● Alimentos con alto contenido de grasas saturadas o trans

● Se recomienda reducir el consumo de carnes rojas y sus derivados.

● Alimentos muy azucarados como pasteles y refrescos.

Debido a que estos productos están altamente asociados al aumento de la actividad de la Esclerosis Múltiple, generando exacerbaciones o recaídas y aumentando el riesgo de desarrollar nuevas lesiones.

También se debe reducir el consumo de alimentos crudos para evitar contraer alguna infección. Los alimentos como carne, pollo, huevos, entre otros, deben ser correctamente lavados y cocinados para eliminar los microorganismos que pueden poner en riesgo la salud.